¿Está pensando en comprar y ha empezado a buscar una nueva vivienda? Una vez que haya encontrado la posible casa de sus sueños, es importante que venga preparado. Estas son las preguntas más importantes que hay que hacer en la visita, y una que debemos evitar.
¿Qué puedo esperar de esta casa? Hay casas de todos los tipos, formas y condiciones. Por eso es una buena idea comenzar una visita con una pregunta abierta, dando al agente inmobiliario la oportunidad de explicar las condiciones de la propiedad. Esto permite abordar detalles que de otro modo podrían pasarse por alto. Por ejemplo, la cantidad de luz que hay en un apartamento tradicional de los años 40 o la humedad del sótano en una casa de los años 70.
¿Qué pertenece a la vivienda y se incluye en la venta? ¿Y qué se incluye en la comunidad? Esta es una pregunta cuya respuesta puede ser muy variada. En algunas casas, la mayoría de las cosas pueden estar incluidas en la comunidad -desde una plaza de garaje hasta el internet, agua y la electricidad-, mientras que en otras pueden venir como un cargo adicional. Así que, para hacer un presupuesto de vivienda, es importante saber qué costes puede esperar.
¿Cómo se calienta la casa? Puede parecer un detalle en la visita, pero si una casa se calienta con radiadores o suelo radiante eléctricos y la electricidad no está incluida en la comunidad, puede significar facturas de electricidad caras durante los meses de invierno.
¿Cómo es el barrio? En muchas zonas residenciales, especialmente con apartamentos, el paisaje sonoro puede cambiar durante el día. Por lo tanto, es importante pensar en cómo es la situación en su casa a lo largo del día y de la semana. ¿Busca una zona más animada? Entonces, es posible que quiera elegir una casa cerca de restaurantes y tiendas. ¿Le gusta dormir por las mañanas? Entonces puede que no sea una buena idea compartir un edificio de apartamentos con una guardería o vivir demasiado cerca de una carretera principal.
¿Cuándo se hizo el último mantenimiento? Las urbanizaciones suelen tener un plan de mantenimiento para el edificio. A menudo se planean reformas importantes, como la reforma de la fachada o el mantenimiento del bajante en el edificio. Esto puede afectar a la futura comunidad. En una casa, el mantenimiento es aún más importante, sobre todo en lo que se refiere a las cosas más grandes como la electricidad, el tejado y la fontanería, pero también en lo que se refiere al frigorífico y al congelador. Es el deber del comprador investigar. Por eso es importante estar atento en la visita y comprobar cuándo puede ser necesaria la siguiente intervención.
¿Cómo es el acceso al aparcamiento? Los precios y la disponibilidad de una plaza de aparcamiento varían mucho. En algunas partes de las ciudades, el aparcamiento puede estar cerca, pero con mucho tráfico y tarifas caras. Por lo tanto, asegúrese de la disponibilidad de plazas de aparcamiento antes de comprar, y no se sentirá decepcionado.
¿Consideraría vivir aquí? Quizás la pregunta más obvia, pero también la más importante. En muchos casos, la compra de una vivienda es la mayor compra de su vida. Así que hágase esta última pregunta.
También hay una pregunta que muchos compradores se hacen, pero que por muchas razones no es necesaria.
Pregunta que no debe hacerse en la visita: ¿por qué se vende la propiedad?
Una de las preguntas más comunes en muchas visitas, según los agentes inmobiliarios. Pero es casi imposible responder. Las razones para mudarse pueden ser muchas. La vida cambia constantemente. Los hogares pueden haber aumentado o disminuido. También puede tratarse de un nuevo trabajo, una nueva casa o que el vendedor simplemente quiera cambiarse de casa. Si el vendedor se muda porque algo está mal en la casa, esto entra dentro de la obligación de divulgación. Esto hace que la pregunta sea innecesaria e imposible de responder.